Wednesday, October 31, 2007

El majá y la jutía

Allí estaban enroscados el majá y la jutía condenados a muerte.

La jutía paralizada en parte por el miedo y en parte por aquella saliva babosa que la sofocaba, chillaba tratando de intimidar al predador.

El majá prácticamente incapaz de moverse abrumado por el peso y el volumen de tan formidable presa siseaba tratando de seducirla.

Entonces bajó la tiñosa, casi puede decirse que con gracia y se posó en una roca a pocos pasos de los contendientes. Los miró primero con el ojo izquierdo y luego con el derecho. Se acercó un poco más como para cerciorarse de que ninguno de los dos podía moverse. Cuando ya los tenía a su alcance, lanzó un picotazo formidable y arrancó un pedazo de carne grasosa del lomo del majá. Mientras la tiñosa engullía su bocado sin prisas, la jutía, que talvez sintió disminuir la presión de las mandíbulas del majá, hizo un ultimo esfuerzo por zafarse. No lo logró. Al contrario, en uno de esos brincos su cabeza, fue a caer precisamente bajo el pico de la tiñosa. Poco a poco, cada uno fue pagando en impuesto un pedazo de su cuerpo a la tiñosa.

Cuando dejó de oírse el siseo y los chillidos y ya no quedó aliento ni bocado digno en ninguno de los dos, la tiñosa se fue al arroyo a limpiar su pico.

3 comments:

Osvaldo Cleger said...

toda un alegoría política y social

saludos desde el desierto

Al Godar said...

Osvaldo,
Si. Es un recurso fundamentalmente alegórico. Lamentablemente la escena del majá y la jutia no es mia. La tomé prestada del cuento de igual nombre del libro "Condenados de Condado" de Norberto Fuentes. Yo le añadí la tiñosa para ampliar su sentido, como tu bien dices, político y social.
Gracias por la visita.

lola said...

Eso mismo pasa en España, derecha e izquierda se destrozan y el buitre (los nacionalismos ultras) están al acecho. Saludos!!